Los muros de los edificios aún son golpeados por impactos de bala. Algunos líderes de la guerra civil todavía corren las calles. Pero en la capital de Liberia, Monrovia y en el pueblo pesquero de Robertsport, las tablas de surf hacen sonreír a los niños y les permiten olvidar durante un tiempo los 14 años de guerra y el paso mortal del ébola. Para reconstruir, y dar un nuevo impulso a esta joven generación. Esta renovación es lo que Arthur Bourbon y Damien Castera quieren mostrar, a través de su película documental "Múkùné" (que significa renovación). La idea: compartir estas olas con la primera generación de surfistas de Liberia.