La edad apropiada para que un niño comience a surfear es un tema que a los padres les preocupa. Muchos dicen que deberían comenzar a correr cuando sepan nadar y controlen su flotabilidad. Otros combinan la enseñanza de la natación con ejercicios entorno al surf para potenciar la flotabilidad, equilibrio y fuerza, lo que le da al niño más seguridad para su aprendizaje. Lo cierto es que cualquier edad es buena, y si es con una supervisión de por medio, mucho mejor.
Por ejemplo, los expertos en el tema como los pediatras y lo instructores de tabla, mencionan que si un padre quiere introducir a su hijo de cuatro hasta los seis años de edad en el surfing, es importante matricularlo en una academia de natación para que aprenda a nadar, flotar y las diferentes técnicas de respiración que se utilizan en la natación , en pocas palabras a familiarizarse con las posibles condiciones que te pueden ofrecer el océano.
Después de entrenarse en una piscina, es allí que el niño está casi listo para adentrarse al mar, obvio siempre acompañado de un entrenador. Tenemos que tener en cuenta que la supervisión de los niños en edades tempranas es muy importante para evitar cualquier tipo de problema en el aprendizaje del surfing.
Aunque en la actualidad, existen niños cada vez más jóvenes que experimentan la increíble sensación de deslizarse sobre las olas, una de las mejores edades también para hacerlo está entre los 8 a 10 años. Los niños de esta edad tienen la paciencia y la fuerza necesaria para este deporte, así como las habilidades de natación. Ellos ya son capaces de cargar y llevar su tabla de surf, y poder remar por si solos hacia el line up.
Lo más importante de todo, es que el surf es uno de los mejores deportes para niños porque mejora y desarrolla las cualidades físicas más esenciales en las primeras edades: resistencia, fuerza, velocidad y flexibilidad. Es básico para su desarrollo psicomotriz y su desarrollo social-afectivo. Al ser un deporte individual, refuerza la toma de decisiones y son responsables de ellas.
El objetivo primordial es que los niños aprendan jugando y divirtiéndose en una actividad física, y que al mismo tiempo disfruten de un entorno incomparable de estrecha relación con la naturaleza. Todo esto ligado una vida sana, plena y feliz.
