Recientemente, el Estado peruano reconoció como rompiente protegida a la legendaria y clásica ola norteña de Chicama, conocida por todo el mundo como la ola más larga del planeta. Para que esto fuera posible, Bruno Monteferri explica que distintas organizaciones lideradas por Hazla por tu Ola debieron recaudar entre 4 mil y 5 mil dólares para lograr que fuera inscrita en el Registro Nacional de Rompientes (RENARO). Al ser la primera ola, las organizaciones han detectado algunos reparos a la ley que pretenden ser subsanados en un corto plazo. “La Ley de Protección de Rompientes sí permite excepcionalmente se afecte una rompiente por razones de interés nacional, pero esta excepción está muy limitada y basada en el cumplimiento de varias condiciones. El único reparo que tenemos es que en la norma aprobada por la Marina no se ha hecho referencia a estas condiciones y se ha buscado dar más opciones a la Marina para poder afectar una ola. Sin embargo, ello está contra el principio de legalidad. Nos vamos a reunir esta semana con los funcionarios de la Marina para que puedan enmendar ese error y para definir un modelo de resolución que esté acorde con lo que establece la ley y el reglamento”, comentó el líder de Conservemos por Naturaleza, Bruno Monteferri para SurfBeats Radio.